A través de un seguimiento puntual del proceso enseñanza-aprendizaje de los programas educativos por cohorte generacional se ha logrado establecer estrategias que han permitido mejorar el seguimiento de población estudiantil de forma tal que se ha incrementado el porcentaje de eficiencia terminal con relación a los años anteriores. Con ello se contribuye al logro de las metas planteadas en 2024.